UN SUEÑO QUE NO ME GUSTARÍA NADA QUE SE HICIERA REALIDAD

 

UN SUEÑO QUE NO ME GUSTARÍA

 NADA QUE SE HICIERA  REALIDAD  

 

Una vez cuando era muy pequeña me encantaban los caracoles hasta que un día soñé que un caracol gigante me comía, era normal soñar en eso porque ese día había estado dando caracoles a mi tortuga, que ella come caracoles y dormía con un caracol de peluche gigante, desde entonces tengo pánico a los caracoles, todos creeréis que es una tontería y yo también lo creo, ahora ya no les tengo miedo pero no me gustan nada.