LA CHICA DE LA CURVA
La leyenda cuenta que un chico que trabajaba en Valencia, que vivía en un pueblecito de la montaña, después de trabajar estaba llegando a su casa en coche y de repente notó algo raro. Salió del coche para comprobar que ese ruido era algo sin importancia y se volvió a meter en el coche. De repente vio a una chica hermosa de vestido largo y blanco sentada en la parte trasera de su vehículo. Era inexplicable ya que su coche no tenía más que dos puertas y en una de ella se había estropeado la cerradura. El chico no se lo explicaba, pensaba que era imposible pero no, era verdad, la chica estaba atrás de su coche. El hombre tenía mucho miedo y no se atrevía a hablar pero puso el coche en marcha camino de su casa. La chica tenía todo el rato la mirada distante y en cuanto el hombre se despistó un momento ¡ZAS! la chica le agarró del cuello intentándolo asfixiar y con unos ojos casi saliéndose de las órbitas le susurró con los labios helados…
Nos veremos en el infierno, donde estoy desde aquella noche que me atropellaste en la curva que acabamos de pasar. ¿Recuerdas?
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Luz -