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l´escola parla

Ser profesor no es fácil

Para mi, mis alumnos deberían ser buenos estudiantes. No burlarse si hago alguna tontería (repetirla muchas veces hasta hacerme enfadar), criticar mi forma de hablar, etc... Eso sí, que tengan sentido del humor. No quiero una clase seria y aburrida, pero quiero que se aprenda y que los alumnos se diviertan.

A la hora de corregir exámenes quiero darme una alegría con las notas del 90% de la clase (si puede ser, con el 95%, 99,99999% o 100%).

Aunque quiero que mis alumnos sean felices en clase, no pueden hacerme cabrear ni que se pongan a hablar muy alto. Si salgo por algún motivo (cambio de clase, me llama la directora o algún profesor, hay técnicos y necesitan ayuda, etc...) no quiero oír gritos. Hay que hablar bajo, o también sería muy bueno que fueran haciendo lo que les he mandado.

Me gustaría que los alumnos aprendieran de una forma divertida porque si se aburren dejaran de mostrar interés.

1 comentario

luz -

Sí, no es fácil enseñar, Manolo siempre dice "el maestro tiene que ser perfecto" y es que es muy difícil hacerlo bien: motivar, divertir, comprender, animar...y sobre todo enseñar, pero con algunos de vosotros sí es fácil.